Rodrigo González|Tuxtla Gutiérrez
«Desde un punto de vista humanista, la consolidación de la Guardia Nacional ha adquirido una relevancia mayor, pues es un organismo no solo enfocado en la contención de violencia y combate a los grupos delictivos, sino también en la promoción de los derechos humanos y dignidad de todos los mexicanos».
En este tenor se manifestó Flor de María Esponda Torres, presidenta de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso del estado de Chiapas, luego de que dicha soberanía aprobara el decreto por el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Constitución Política de México en materia de la citada corporación.
Recordó que, para llegar a la mencionada aprobación, anticipadamente se turnó a la LXVIII Legislatura estatal la minuta con proyecto de decreto por la cual se interpreta el alcance del artículo 3ro transitorio del decreto referido.
La legisladora de Morena hizo alusión que el 26 de marzo de 2019 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto por el cual se creaba la Guardia Nacional, partiendo de una necesidad del Estado mexicano, que era la frágil condición de la Seguridad en el país, ante la debilidad de muchos cuerpos policiales y otros corrompidos por el crimen organizado.
Aseguró que desde hace casi cinco años la esencia y función de la GN es mantener el contacto cercano, primeramente, con la sociedad, respetando la vida, la integridad y las libertades constitucionales de cada persona.
«Las nuevas disposiciones aprobadas por el Congreso de la Unión fortalecen estas funciones para garantizar a los miembros de la GN sus derechos, prestaciones, pertenencia, rango, servicio y antigüedad», señaló la representante popular.