Rodrigo González|Ciudad de México
En este inicio de semana, el presidente Andrés Manuel López Obrador reprochó que un magistrado del tribunal electoral haya pedido que se revise y se prohíba su más reciente libro ¡Gracias!; la recomendación fue comparada con la lista de libros prohibidos que realizó en su momento la Santa Inquisición.
En respuesta a esto, López Obrador pidió esperar a una posible resolución y hasta presumió que su obra va en primer lugar de ventas.
“¿Les presumo para que se rían? no se enojen nuestros adversarios, que los queremos mucho, porque no son enemigos, son adversarios. La verdad hasta me dan ternura. ¡Ternuritas! Va en primer lugar de ventas, vamos a seguir”.
El viernes pasado, el magistrado Reyes Rodríguez Mondragón propuso que el Instituto Nacional Electoral (INE) revise el último libro de López Obrador para confirmar que no existen expresiones que violen la ley electoral. Esto después que el 27 de febrero la aspirante presidencial de la oposición presentó ante el Instituto una queja por la obra, al considerar que, al publicarla 20 días antes de la campaña, el jefe del Ejecutivo “realizaba actos anticipados” porque en éste la desacredita como abanderada y “favorece” a la candidata de la 4T, Claudia Sheinbaum.
“Un magistrado del tribunal está pidiendo que se revise mi libro y se prohíba, o sea, es la inquisición. Un magistrado que se apellida creo que Franco. Pero lo pidió alguien que no puedo mencionar aquí porque ya no puedo hablar de ciertas personas. Vamos a esperar a ver si la Inquisición lo pone en libro prohibido, como era antes (…) Leí que lo iban a revisar”.
López Obrador refirió que el INE había desechado la petición —de Gálvez—, pero se acudió al tribunal electoral que está pidiendo revisar.
El presidente dijo que la determinación se tomará el miércoles de esta semana.
“Ni modo que yo borre, o podemos hacerlo así, que lo adquiera la gente y que no lea lo que está prohibido”, ironizó.